LA VERDADERA ALIANZA

Mientras el debate para elegir Gobernador y Alcaldesa se ha limitado a definir cual alianza es mejor, los barranquilleros y atlanticenses observamos como cada día más el desarrollo y pujanza de Barranquilla se distancia del estancamiento y desesperanza de los municipios, que no ven cerca la posibilidad de crecer a la velocidad de esta capital. Ahí esta pues el gran debate que debería ocuparnos, una unión que permita disminuir la pobreza, sacar el agua del sur que ya casi cumple un año, generar empleo, le devuelva a la ciudad su puesto número dos en importancia para el país, logre resolver el problema portuario y lleve a los municipios, entre otras cosas, educación del mismo nivel o mejor que la recibida en Barranquilla.

Estamos muy ocupados en descubrir quienes son los que están detrás de los candidatos y se nos olvida que hay muchísimas necesidades cuya solución deberían ser la pieza fundamental del debate. 

¿Cómo lograr que las 40 mil hectáreas de tierra aptas para la agricultura con que cuenta el Departamento y que hoy solo producen pequeños cultivos campesinos o de pan coger puedan convertirse en la despensa de las 15.000 tiendas que hay en Barranquilla y su área metropolitana donde se comercializa el 53% de los productos de consumo masivo?, hay muchas cosas que debatir y muchas alianzas posibles, por ejemplo, la que logre que UNDECO garantice a nuestros campesinos ahora también damnificados la compra de sus hortalizas, yuca, maíz, frijol, plátano, mango, guayaba y melón, desde el momento de la siembra y con ello quitarle al campesino la angustia de sacar su yuca a mitad de camino para poder atender un problema de salud de su hijo y por el contrario esta unión podría llevarnos a tecnificar la tierra, abaratar costos de la materia prima y aprovechar de una vez por todas el río para traer muchísimo más barato esos productos. Este tipo de alianzas si que deberían ocupar nuestro debate de octubre.

 

En la educación, Barranquilla ofrece 35 carreras profesionales y 280 carreras y/o cursos técnicos, este es el otro punto que me gustaría ver dentro del debate, ¿cómo lograr que los(as) jóvenes del Departamento puedan acceder al mismo nivel y calidad de educación que se ofrece en el Distrito?, teniendo en cuanta que para poderse trasladar desde Santa Lucia, Suán, Repelón, Tubará, Juan de Acosta, Manatí o Sabanalarga se gastan 20 mil pesos en transporte; si viniera a estudiar 5 días a la semana se gastaría 100 mil pesos lo que representa 400 mil pesos mensuales sólo en transporte, sin tomarse siquiera una bolsa con agua. Por mucha beca que consiga, si su padre gana el salario mínimo ese muchacho está condenado a no estudiar.

Aquí hay otra gran alianza indispensable, hoy en día utilizando el Internet de banda ancha con el que cuentan todos los municipios del Atlántico, sería posible que a la misma hora que un profesor dicta su cátedra en una Universidad o Instituto de Barranquilla, aparezca este en una pantalla digital en los 23 municipios y los estudiantes lo escucharían, podrían hacerle preguntas y obtendrían respuestas que enriquecerían sus conocimientos con las experiencias de otros, sin necesidad de grandes infraestructuras, ahorrando gastos de transporte y con la misma calidad de educación que se recibe en Barranquilla.

Estamos a tres meses de elegir Gobernador y Alcaldesa, no se si convenga más la unión de: Gerlein, Name, Char y Cepeda que la de Ashton, Pulgar, Acuña y Miguel Amín, o la de Crissien con otros, qué es donde hasta ahora se ha centrado el interés de los medios más influyentes de la ciudad, de lo que si estoy seguro es que tenemos grandes necesidades que exigen otro tipo de alianzas en las que debería estar centrado el interés de este debate.


Este artículo fue publicado en el diario LALIBERTAD el día 27 de julio de 2011. http://lalibertad.com.co/dia/2011jul27/ed1.html

PELIGRO, LOCOMOTORA MINERA ENCENDIDA

Debo empezar por aclarar que estoy de acuerdo con el desarrollo minero y lo que es más, me gustaría que en Barranquilla estuviéramos mucho más dispuestos a crear las condiciones para desarrollar nuestra vocación portuaria con intenciones de facilitar la salida del producido de la minería colombiana pero con actitud mucho más participativa e incluyente que se represente en regalías, empleo, experiencia y progreso.

Pero mientras la robusta locomotora minera se echó andar ya con criticas y escándalos que endilgan, por un lado, que la reforma al código de minas surtida dentro del periodo 2006 – 2010 fue elaborada en parte por una consultora canadiense y son precisamente empresas del mismo país quienes ostenten la mayor extensión de licencias mineras en Colombia, y por otro, que muchos exfuncinoarios del gobierno Uribe hoy trabajan para el sector en procura de licencias mineras y ambientales rápidas (Manuel Rodríguez El Tiempo 11/7/11). El país afronta el reto de robustecer las autoridades ambientales asignándoles nuevas facultades y obligaciones para que puedan enfrentar los impactos de esta poderosa locomotora minera que más que encendida ya esta movilizando millones y extrayendo metales hasta de los páramos.

Este reto no parece ir por buen camino, la fusión de autoridades ambientales que iniciará su debate en la próxima legislatura, dará paso a Corporaciones robustas en responsabilidades, territorio y funciones pero sin recursos que le permitan afrontar las cada vez mayores exigencias ciudadanas, el solo amago que se hizo el año pasado tenia a la CRA y CARDIQUE más embolatadas y nerviosas que las denuncias penales de sus directores. Estas entidades cada vez pierden más recursos para ejercer funciones de vigilancia y control, en julio de 2010 fue expedida por el Min. Ambiente la Resolución 1280 que disminuyó las tarifas que estas cobran por los servicios de evaluación y seguimiento de Licencias, permisos, concesiones y demás instrumentos de control y en octubre de ese mismo año fue eliminado el permiso de vertimientos líquidos con la expedición del Decreto 3930 que lo dejó solo obligatorio para empresas prestadoras de servicios de alcantarillado y aquellos que no estén conectados al sistema, lo que representa solo para Barranquilla una disminución cercana al 40% de los ingresos destinados a gastos de seguimiento y control.

Pues bien, de la mano con la pujante bonanza minera debe ir el fortalecimiento de las autoridades ambientales y este aspecto no da espera pues ya tenemos cerca de 8 mil títulos mineros otorgados que representan el  8 por ciento del territorio nacional y hay proyecciones al menos de 2 millones de hectáreas más por concesionar. Los ganaderos del Cesar que colindan con las minas de carbón cada día están más preocupados porque sus tierras han perdido productividad, ríos y arroyos han variado su cauce y no se ve capacidad en las autoridades ambientales para garantizar la sostenibilidad de tantos ecosistemas hoy intervenidos.

El problema radica en el mecanismo de financiación de las autoridades ambientales pues, mayores controles y vigilancia implican mayores gastos y no existiendo otro mecanismo de financiación que el otorgamiento de licencias, permisos y multas, las autoridades ambientales estarán cada vez más forzadas a la flexibilidad. 


Este artículo fue publicado en el diario LALIBERTAD de Barranquilla, el día 19 de julio de 2011 página 2 A. http://lalibertad.com.co/dia/2011jul19/ed1.html